En el pasado, existía una clara tendencia a enfocar la gestión del espacio urbano, sin entender que la ciudad es para las personas. Tanto es así que se desarrollaron grandes infraestructuras que pasaban por encima de los tejidos urbanos, generando barreras arquitectónicas. En lo que respecta a Irun se construyó una playa de vías que, actúa como un rio de ancho cauce que roba una superficie urbana vital para la ciudad y limita la movilidad de las personas a lo largo de casi 1,2km. Desde el puente de Belaskoenea, hasta el puente de Colón no existe ninguna posibilidad de paso, quedando la ciudad dividida en dos, sin olvidar que existen otros 500m más dirección Ficoba.

Por suerte, en los últimos años, cada vez son más las ciudades que llevan a cabo acciones para revertir la transformación que han padecido durante años, ampliando espacios urbanos y facilitando la movilidad de las personas. Como por ejemplo en Donostia, Bilbao, Durango o Erandio, dónde se ha intervenido contra las barreras arquitectónicas mediante actuaciones responsables que crean y tejen esas conexiones perdidas.

En el caso de Irun y tal y como recoge el PGOU vigente, el espacio ocupado por las instalaciones ferroviarias es probablemente el más importante para el futuro de la ciudad. Cualquier actuación en la zona debe mirar más allá y tratar este ámbito como lo que verdaderamente es; un espacio de oportunidades, clave para ampliar el centro de nuestra ciudad y la única posibilidad para comunicar los barrios situados a ambos lados del trazado ferroviario. Un planteamiento que defiende y alberga nuestro proyecto Via Irun 2030 y así se ha plasmado, además, en distintos documentos en el proceso de elaboración del Plan General de la ciudad aprobado en 2015.

Via Irun 2030 es eso y más. Es cubrimiento parcial de las vías, creando nuevos espacios y revitalizando barrios, es creación de nuevas conexiones viarias, desde San Miguel hasta Pio XII, es un nuevo acceso seguro, directo y rápido a la estación de autobuses, es una estación intermodal que integrará todos los modos de transporte, es más desarrollo económico en el centro de nuestra ciudad, es un corredor verde ecológico desde Ventas hasta Plaiaundi, Via Irun 2030 es una gran oportunidad que no queremos dejar pasar. Un proyecto que ya presentamos tanto al Alcalde, al Gobierno Municipal como a los grupos de la oposición.

En este sentido, para nuestro grupo, EAJ-PNV, es fundamental recuperar ese espacio público para Irun y sus personas. Debemos contribuir a la unión y articulación de la trama urbana sobre el espacio ferroviario, de forma que se aproveche esta única ocasión, así como, ofrecerle a Irun ese beneficio social de altísimo valor. Porque la generación de un nuevo gran espacio peatonal abriría nuevas posibilidades de realizar diferentes eventos, y reduciría el impacto acústico y visual que genera la playa de vías en la actualidad.

Por todo lo descrito previamente, llevamos tiempo trabajando para que Irun tenga lo que realmente merece, y en ese camino, hemos conseguido que se incorpore un millón de euros a los Presupuestos Generales del Estado, para realizar el Proyecto de ejecución de Via Irun 2030. Asimismo, y en la misma línea, hemos presentado al Gobierno de Sanchez, en la negociación presupuestaria de este año para el 2023, 20 millones de euros para poder ejecutar la cubrición. Creemos que Irun puede aspirar a más, y así nos lo han trasladado además los y las irundarras en los encuentros de socialización que hemos realizado durante este último año.