El Ayuntamiento de Aretxabaleta ha cerrado el ejercicio presupuestario de 2021 con un remanente de tesorería de 5.000.000 de euros, que el Gobierno municipal quiere  destinar, en gran medida, a nuevos proyectos que no están recogidos en las cuentas públicas de 2022, como la estabilización de la ladera de Txarapea y la urbanización del entorno del antiguo convento.

Según ha explicado el alcalde, Unai Elkoro, con este excedente presupuestario se afrontarán “nuevos proyectos encaminados a seguir avanzando en la construcción de un municipio cómodo para vivir, atractivo y accesible, y, a su vez, nos permitirá hacer frente a algunas actuaciones que requieren de una solución como es la estabilización de la ladera de Txarapea”.

La cifra que arroja el remanente procede, principalmente, de las partidas que no se han ejecutado por el retraso que han sufrido algunos proyectos, así como de los ingresos percibidos que han sido mayores de lo previsto.

De este montante de cinco millones de euros, dos millones de euros se han destinado a costear dos proyectos estratégicos para el Gobierno municipal: las obras ya en marcha de la calle Santakurtz, y el centro social para personas mayores que se proyecta en el convento.

De los 3.000.000 euros restantes, el Gobierno municipal propone incorporar un total de 2.200.000 euros al presupuesto de 2022 con el objetivo de acometer los siguientes proyectos:

1. Nuevo sistema de climatización para Arkupe (placas solares y aerotermia). 100.000 euros que se suman a los 85.000 euros reservados en los presupuestos de 2022. Otros 15.427 euros se asignan a la redacción del proyecto.
2. Ascensor público para conectar desde las viviendas de la plaza Iturrizar el paseo que bordea la margen del río con Txarapea ibilbidea. 416.300 euros (proyecto y ejecución de la obra).
3. Estabilizar la ladera de las viviendas de Txarapea. Se destinan 273.486 euros (el total de la inversión de estas obras asciende a 650.000 euros).
4. Reurbanización del entorno del convento. 640.000 euros (urbanización, integración en el entorno con el derribo del muro y construcción del puente para permitir el paso desde el convento al otro lado del paseo que bordea el río).
5. Nuevo sistema de riego para el campo de fútbol de Ibarra. 22.650 euros.
6. Hacer frente a la subida del precio de la electricidad, gas y basuras. 403.000 euros.

El primer edil ha destacado, asimismo, que del remanente plantean dejar 800.000 euros para hacer frente a imprevistos y gastos no contemplados que puedan surgir. “Tenemos que seguir siendo precavidos. La invasión rusa de Ucrania está repercutiendo en lo económico y, además, todavía estamos sufriendo las consecuencias de la pandemia, que nos ha condicionado los últimos ejercicios presupuestarios. Ante esta inestabilidad hay que estar preparados para responder a imprevistos y necesidades”, ha añadido el alcalde aretxabaletarra.

El Gobierno municipal llevará su propuesta al siguiente Pleno para su aprobación.