Tras varios intentos fallidos en legislaturas anteriores, esta vez sí el Parlamento Vasco aprobará la Ley Vasca de Juventud, una norma que pretende dar una respuesta integral a los problemas que hoy en día tienen los y las jóvenes. La comisión de Políticas Sociales y Juventud ha dado esta tarde el visto buen al dictamen y la ley sólo quedará pendiente de su ratificación por el Pleno de la Cámara. Una noticia muy positiva, en palabras de la parlamentaria Maialen Gurrutxaga, que permitirá ofrecer un horizonte de mayor esperanza e ilusión a la juventud vasca. “La Ley recoge todo aquello que nos afecta. El empleo, la vivienda, la educación, la igualdad, el euskera, el voluntariado….Es una respuesta integral a las dificultades que hoy impiden a muchas personas jóvenes desarrollar sus proyectos de vida. Si queremos construir un futuro mejor debemos invertir en la juventud. Si queremos mirar con ilusión al futuro y que nuestros y nuestras jóvenes piensen que merece la pena luchar, debemos reforzar las políticas públicas. Y esta nueva norma es la respuesta”.

Con medidas y acciones concretas, la ley se marca como objetivos la reducción progresiva de la edad media de emancipación, la incorporación de la perspectiva juvenil a todas las políticas públicas y el impulso de la participación social. Retos que la representante jeltzale ha calificado de “ambiciosos pero realistas”, y que, tras el debate parlamentario y posterior acuerdo con Elkarrekin Podemos-IU, han salido reforzados. Gurrutxaga ha valorado el consenso alcanzado y el ejercicio de diálogo practicado. Ejemplo de ello es el hecho de que de las 149 enmiendas que han presentado los grupos, más de 100 han sido aceptadas o consensuadas. “Un gran acercamiento que nos ha permitido reforzar la protección en ámbitos tan determinantes como la inclusión, la igualdad y la emancipación. Ha habido muy pocos espacios donde no hayamos tenido una alta sintonía. Y esta es una gran noticia. También para que la juventud vea que en el diálogo está la herramienta para solventar problemas o diferencias”, ha dicho.

Gurrutxaha ha recordado que la ley llega en un momento extremadamente complicado para la sociedad, y en especial para la juventud, que tras dos años de pandemia ha visto truncados muchos de sus sueños. “La pandemia ha supuesto un duro golpe; ha frustrado planes de formación, de empleo, ocio….expectativas de vida que se han visto truncadas. Por eso consideramos que la norma llega en el mejor momento, cuando más amparo y protección necesitan, cuando debemos escuchar sus voces y colocarles en el centro de nuestras agendas. Cuando deben de ser los y las protagonistas”. La juventud es futuro, ha concluido, y hoy estamos apostando por ella. “Damos nuestro sí a una ley que ayudará a la juventud a construir sus vidas de manera independiente”.