“Gipuzkoa se encuentra inmersa en una profunda transformación demográfica”, una realidad ante la que el diputado general, Markel Olano, ha mostrado la determinación y el compromiso de promover “la colaboración entre instituciones y agentes sociales y económicos”, así como activar “todas las herramientas” con las que cuenta la institución foral. “Nos encontramos ante un reto de enormes dimensiones que nos va a exigir altas dosis de innovación, colaboración y determinación. Se trata de un desafío de país de primer nivel, que requiere articular una respuesta avanzada, integral e igualitaria”, ha planteado.

El diputado general ha realizado estas declaraciones en la apertura de la jornada Desigualdad y reto demográfico en Gipuzkoa celebrado hoy en el palacio Miramar de Donostia, en el marco de la 40ª edición de los Cursos de Verano de la Universidad del País Vasco, que ha protagonizado esta mañana junto con la rectora de UPV/EHU. Además de los diversos expertos y ponentes, han participado en la inauguración el diputado foral de Hacienda, Jokin Perona; la directora del curso y directora foral de Política Fiscal y Finanzas, Bittori Zabala; y el secretario general de Transición Social y Agenda 2030 del Gobierno Vasco, Jonan Fernandez.

Markel Olano ha recordado que “la cohesión social” es una de las “principales características” del modelo socio-económico de Gipuzkoa, un rasgo cuyo desarrollo exige “el esfuerzo de todos y de todas”, para que el territorio se consolide como “uno de los lugares con menos desigualdades de Europa”. Las transformaciones sociales y económicas “de fondo” que se están produciendo, sin embargo, plantean “nuevas interrogantes” que, según el diputado general, pueden afectar a los “cimientos” de nuestra sociedad. Entre todos estos cambios, ha resaltado la importancia del reto demográfico, que ya ha generado en el seno de la sociedad guipuzcoana “un acentuado envejecimiento y el descenso de la natalidad”, entre otros aspectos.

113 millones de euros en deducciones fiscales

Ante esta realidad, el máximo mandatario del territorio ha abogado por articular “una respuesta “avanzada, integral e igualitaria”, en el que adquieran protagonismo las políticas de fomento de la natalidad y de la conciliación corresponsable. Según ha apuntado, a pesar de los avances habidos en la equiparación y ampliación de los permisos de maternidad y paternidad, seguimos “cojeando” en la corresponsabilidad en el cuidado y las tareas del hogar. “Necesitamos promover un cambio cultural en nuestras empresas, en nuestro tejido social y económico, en nuestras vidas, para que las mujeres puedan desarrollar su vida personal y profesional en igualdad”, ha sentenciado.

En este apartado, entre otros, la Diputación viene impulsando la red Erantzunkide Sarea de empresas que impulsan la conciliación corresponsable en el seno de sus organizaciones, una iniciativa orientada a compartir experiencias y prácticas positivas en esta materia. Tampoco podemos olvidar los incentivos fiscales en la declaración del IRPF que, desde la Hacienda foral, se ofrecen a las familias con hijos e hijas a su cargo. Se trata de los incentivos más importantes relacionados con el IRPF y han visto aumentada significativamente su cuantía en los últimos dos años. En 2020, se aplicó este incentivo fiscal en 160.387 declaraciones, sumando un total de 113 millones de euros, mientras que la suma total de las deducciones por este concepto en los últimos diez años es superior a los 1.100 millones de euros.

En segundo lugar, el diputado general se ha mostrado partidario de desarrollar “una mirada positiva y proactiva” en torno a la inmigración, que incluya políticas de impulso de la diversidad y promoción de la transmisión de la cultura y lengua vascas. “Debemos ofrecer una respuesta humanista y democrática a esta cuestión. Pero, además, la participación de las personas que llegan a Gipuzkoa desde otros países va a ser necesaria si queremos sostener a nuestra industria y a nuestra economía”, ha completado.

Olano también ha subrayado que una sociedad avanzada como la guipuzcoana debe ser capaz de generar “una economía suficiente” que garantice un empleo digno para todas las personas, porque “el trabajo es algo vital” para desarrollar “un proyecto de vida, un proyecto de familia”. “Gipuzkoa tiene que ser un territorio que ofrezca un horizonte de oportunidades, un futuro, sobre todo a las personas jóvenes, así como a los colectivos más vulnerables de la sociedad”, ha afirmado.

Por último, el diputado general ha abogado por ofrecer “una respuesta social colectiva” a las personas mayores, teniendo en cuenta que en 2031 un total de 351.000 guipuzcoanos y guipuzcoanas tendrán más de 55 años. “Es el momento de desarrollar, diseñar y aplicar las políticas sociales del futuro, siempre desde la perspectiva de los servicios y del cuidado. Fomentando el envejecimiento saludable y activo, potenciando la participación de las personas mayores y desarrollando sus relaciones con la comunidad de su entorno”, ha manifestado Olano, quien, a su vez, ha recordado que esta nueva realidad trae consigo la creación de un nuevo sector económico. “Tenemos la oportunidad de poner la capacidad de innovación de nuestro territorio al servicio del envejecimiento saludable”, ha añadido, tal y como persigue la fundación Adinberri creada por la Diputación con este objetivo.

“Ante un desafío de tal envergadura, como el que plantea el reto demográfico, poco puede el trabajo aislado de una sola institución u organización. Ante un reto de país como éste, resulta imprescindible la colaboración de todas las instituciones y, cómo no, la contribución y el esfuerzo de todos los agentes sociales y económicos. Sólo así conseguiremos responder a este profundo desafío y, en el futuro, mantener la cohesión social que nos caracteriza como pueblo”, ha resumido el diputado general.